Llevo tiempo queriendo escribir sobre optimización web, y la verdad, es que me costaba encontrar el punto desde el que partir. Sin embargo, hace unos días estaba realizando una auditoría de captación web y me di cuenta que justo ese era el punto de partida que estaba buscando.
Tanto si trabajas en una agencia de marketing digital, como si lo haces en cliente final o estás desarrollando tu propio proyecto, tener una visión general sobre tu ecosistema web es algo realmente necesario para poder realizar un mejor trabajo digital. De hecho, diría que es algo completamente imprescindible.
¿Por qué perdemos el foco cuando hacemos webs?
Cuando construimos una web lo hacemos atendiendo a una serie de necesidades puntuales (un briefing). Se realiza un diseño, unos contenidos y un trabajo de desarrollo para cubrir esas necesidades y dar a luz una web lo más válida posible para nuestro mercado.
El principal problema es que las webs con organismos vivos, en constante crecimiento y evolución. Es por eso por lo que ese planteamiento inicial de web puede verse alterado a lo largo del tiempo. Justo entonces es el momento en el que parar y analizar.
¿Qué es una evaluación heurística?
La evaluación heurística nace a partir del concepto de pensamiento heurístico, algo que podríamos definir como una metodología ordenada orientada a encontrar problemas y sus soluciones.
Este concepto trasladado al mundo digital nos aporta una visión completa sobre el ecosistema digital, una especia de checklist que nos obliga a analizar cada esquina de nuestra web, cada elemento, cada color y en definitiva cada objetivo.
El mi trabajo recurro a este tipo de evaluaciones cuando nos encontramos frente a un nuevo proyecto o cliente. Cuando recibimos una nueva web sobre la que hay que trabajar y necesitamos organizar y planificar nuestros esfuerzos. Como usuario habitual de la web Nosolousabilidad.com, utilizo su Guía de Evaluación Heurística de Sitios Web.
Este es un ejemplo perfecto de auditoría, donde de una forma metódica y progresiva vamos revisando cada aspecto para sacar conclusiones de mejor.
En definitiva...
Una web es un organismo vivo, que hay que mantener en constante revisión. Al igual que el ser humano acude al medico de forma periódica a hacerse chequeos de salud, una web debe de someterse a escrutinio periódicamente para detectar puntos de mejora. El equipo de marketing y diseño ha de ser el encargado de revisar con precisión cada elemento, y acompañado de una metodología como la evaluación heurística, detectar si existen puntos ciegos a solucionar (elementos arbitrarios que no cumplen ningún objetivo), puntos a evolucionar (elementos que han quedado obsoletos y hay que reenfocar) o nuevas oportunidades a cubrir (nuevas tecnologías web, nuevos elementos de captación, etc.)
¿Estás de acuerdo conmigo?
¿Sueles realizar evaluaciones heurísticas? ¿Te gustaría aportar algo más? Me encantará conocer tu opinión 🙂
No Comments.